martes, 9 de diciembre de 2014

8. Coca-Cola, al destapa la felicidad y la Navidad.


Hoy, 9 de Diciembre, comienza la campaña de Coca-Cola para Navidad. Este año, nuevamente tendremos el spot de la gran marca de Atlanta, antes de la tradicionales campanadas de Fin de Año.  Para mis alumnos que quieran seguir de cerca los movimientos del mercado en estas fechas, os paso un interesante enlace con la revista digital Marketing News, con un adelanto del vídeo y los detalles de la realización y adaptación al mercado español: http://www.marketingnews.es/gran-consumo/noticia/1087094028005/asi-adaptara-coca-cola-campana.1.html?utm_source=newsletter&utm_medium=marketingnews&utm_campaign=20141209



No se lo pierdan. Con Coca-Cola vuelve la Navidad y la calidad publicitaria. Enhorabuena.


 

lunes, 1 de diciembre de 2014




7. Cuidado con el fondo, Pablo.



En febrero de 2010 publiqué un entretenido artículo en la desaparecida Revista de Comunicación, del Grupo Wolters Kluger España. Se titulaba "¡Cuidado con el fondo!" y era un repaso a los errores que se cometen por no tener precaución con el fondo de las fotografías, con el escenario donde se hacen las fotos que salen en los medios.

Contaba algunas anécdotas curiosas y otras no tanto, que pasaron a formar parte del anecdotario de la comunicación, para los que somos obsesivos recopiladores de casos antológicos. El viernes pasado, 28 de Noviembre de 2014, el diario El Mundo me ha dado otro caso, con una excelente fotografía de portada realizada por el fotógrafo Alberto Di Lolli. 

En la foto se ve al emergente líder de Podemos con un gigantesco signo de interrogación, que estaba serigrafiado en la pared del lugar donde se hizo la "instantánea", como se decía antes. Sirva este ejemplo para brindar un merecido homenaje a los fotógrafos que tienen intuición gráfica y una envidiable rapidez de reflejos. Algunos más que fotógrafos son cazadores de imágenes que pasan a la historia. Y me temo que esta será una de ellas.

La foto es todo un editorial porque el signo de interrogación lo sigue a Pablo Iglesias como una sombra de duda. La foto sirve para preguntarnos una vez más quién es este personaje verborrágico que ha inundado las tertulias televisivas, donde son bienvenidos los que hablan bien, generan polémica y además no cobran.

Iglesias es una gran duda para todos y el tiempo lo irá desnudando, personal e ideológicamente. Como a una cebolla que esperemos no nos haga llorar, ni de risa ni de rabia, tenemos que ir quitándole las finas capas que forman a este profesor metido a político, para saber qué se trae y sobre todo, qué propone más allá de sus discursos y respuestas que parecen una sucesión de tuits populistas y demagógicos. Iglesias aparece serio en la foto, como meditando su futuro que es toda una incógnita. Igual que el signo de interrogación que se ve de fondo, como si fuera su inseparable sombra.





domingo, 30 de noviembre de 2014

6. La comunicación política en el suplemento Campus.


El miércoles 26 de Noviembre de 2014, el diario El Mundo publicó en su suplemento G/U/CAMPUS un interesante artículo de Sara Polo donde analiza los últimos casos de comunicación política, con opiniones de diversos expertos.

La autora señala al comienzo que si en el curso pasado la novedad fue la creciente importancia de las Redes Sociales (recuérdese que potenciar la presencia del líder en las RRSS fue una premisa del equipo de Alfredo Pérez Rubalcaba en las últimas elecciones), este año el foco se centra en la estrategia de Podemos.

Hay que advertir que a los españoles les llama la atención la verborrea de Podemos porque no han vivido en América Latina. Quienes nacimos del otro del charco, sabemos de memoria las técnicas y estrategias que este año han alumbrado Pablo Iglesias y su equipo. Es tan sencillo como decir lo que la gente quiere oír. O sea, el populismo latino -y sobre todo, muy bolivariano- de viejo cuño, consistente en demonizar a los políticos, a los empresarios, a los banqueros, a los ricos, a los burgueses y por supuesto, al imperialismo norteamericano.

El artículo incluye opiniones de Imma Aguilar (asesora de comunicación del Grupo Entesa y profesora del Máster en Comunicación Política e Institucional de la Universidad Pompeu Fabra, de Barcelona), de José Antonio Ruiz Sanromán (profesor de Opinión Pública y Cultura de Masas) y de Alicia Peñaranda (que trabajó en gabinetes colombianos en la campaña presidencial de Sergio Fajardo).

La autora afirma que "lo que funcionaba en épocas de bonanza, chirría cuando las cosas van mal" y asegura que "la tan manida desafección a la política encuentra su explicación, más que en lo que los líderes hacen mal, en lo que explican mal".

"Creemos más a los líderes con los que tenemos afinidad ideológica", sentencia San Román, y "desconfiamos cuando percibimos que alguien defiende modelos con los que no nos identificamos". El artículo advierte: "nadie se cree ya nada. O al menos, nada que ya haya escuchado".

El trabajo analiza la famosa llamada de Pedro Sánchez a "Sálvame"; revaloriza el papel de la televisión tras el auge de las plataformas 2.0; comenta el plantón que dio Pablo Iglesias al programa "Un tiempo nuevo" y considera que "una nueva organización  horizontal, en la que el ciudadano se siente libre de interactuar con sus representantes, supone una reeducación de la clase política, acostumbrada a ser siempre emisor y rara vez receptor".

Su lectura completa es recomendable para los interesados en este tema.

lunes, 27 de octubre de 2014

5. No cualquiera puede ser portavoz.


El caso de Teresa Romero, la primera contagiada de ébola en España y Europa, puede y debe ser estudiado porque ha tenido diferentes facetas todas ellas vinculadas a la Comunicación. En este caso que felizmente está llegando a su fin, hemos tenido una Situación de Crisis, protagonizada por altos cargos del Gobierno (que merecerá un comentario aparte) y una crisis de portavocía.

Para este profesional, la primera era imprevista, aunque hay que admitir que el Gobierno cometió un primer y grave error: dejar sola ante el peligro que significa una situación de crisis con un caso de contagio grave, a una ministra que nunca se ha caracterizado por su fluidez comunicativa. El gobierno central estuvo escaso de reflejos porque tardó en darse cuenta que era un problema de Estado y no un problema de Salud, circunscripto a un ministerio.

El equipo de prensa de la ministra Ana Mato debería haber tenido apoyo estratégico desde la Presidencia, en el primer minuto. No hubo reflejos y al final tuvo que salir Rajoy a dar la cara y la vicepresidenta Soraya Santamaría, a arreglar los platos rotos. Es curioso que Zapatero tenía a María Teresa Fernández de la Vega, para dar la cara antes temas complejos y Rajoy tiene a Soraya, que se encamina con pasos decididos a un cargo de mayor envergadura en el próximo periodo legislativo.

Pero volvamos a la "portavoz" de Teresa Romero, Teresa Mesa, nombrada al parecer por su marido, Javier Limón. Pongo "portavoz" entre comillas porque esta respetable señora demostró desde un primer momento que no dominaba la Comunicación, ni la Comunicación verbal, ni la Comunicación gestual. No escribió ningún comunicado y se limitó a a transmitir información en forma de comentarios, que eran más un cotilleo sano que una información seria.

Mesa carecía de imagen apropiada y además, se notaba que lo suyo era una improvisación propia de una vecina amable y bienintencionada. En ningún momento dio a entender que recibía instrucciones de lo que podía decir y lo que debía callar y manejó lo que sabía, como mejor pudo. El final estaba previsto: el marido Javier Limón le pidió que dejara de hablar en nombre de la familia  a causa de las "declaraciones desafortunadas" que hizo el pasado jueves. Ese día dijo que la auxiliar de enfermería se sentía "atropellada" y pedía justicia por todo lo ocurrido, incluida, la muerte de su perro.

En sus declaraciones de despedida frente a los medios, el pasado viernes, Mesa dio a entender que había un cierto enfrentamiento entre el abogado de la familia y ella. Dijo que actuó "desde el cariño" que tiene a la pareja (Teresa Moreno y Javier Limón); que lo había hecho "por su bien" y "sin cobrar por ello". Mesa comprenderá ahora, que todo ello no es suficiente. Que para ser portavoz hay que tener una estrategia y una política informativa de la cual ella careció. Y sobre todo, habrá aprendido que un portavoz no puede decir lo que quiere sino lo que le mandan.

Pero es probable que la causa de su destitución haya que buscarla en la cuestión monetaria. Teresa Mesa ha sido una telonera y no sirve para la nueva etapa que se avecina. Las amenazas del marido contra gobierno y autoridades, expuestas en la entrevista exclusiva que publicó El Mundo el pasado domingo, permiten sospechar que Javier Limón está dispuesto a recorrer los platós en busca de sus 15 minutos de gloria, y de rentabilidad.

sábado, 18 de octubre de 2014



4. Una enferma de Ébola, en portada.

La crisis provocada por el virus del ébola desató un gran despliegue informativo de los medios, particularmente de los diarios, que compitieron en conseguir fotos de los protagonistas. Provistos de potentes teleobjetivos y desde edificios colindantes al Hospital Carlos III de Madrid, los fotógrafos trataron de mostrar a la paciente afectada, Teresa Romero y a las demás personas sometidas a cuarentena, entre ellas, su marido.

El diario El Mundo consiguió una fotografía de la auxiliar de enfermería con una mascarilla de oxígeno, dentro de la habitación, que publicó en portada y a 4 columnas, el domingo 12 de Octubre. La fotografía fue tomada de noche (la persiana exterior está a oscuras), aprovechando algún descuido del personal que la atiende, que levantaron un poco la persiana permitiendo ver parte del interior de la habitación.

Dos días después, el martes 14, Víctor de la Serna publicó una interesante columna de su sección "Hojeando/Zapeando", dentro de las páginas de Comunicación. En ella daba cuenta de la polémica en las redes sociales provocada por esa publicación, y planteaba las dudas que había generado: ¿era lícito publicarla, era ético, era legal?

De la Serna aludía a las excesivas prevenciones que hay actualmente antes de publicar imágenes presuntamente polémicas y recordaba que John Hohenberg, de la Universidad de Columbia, inculcaba a sus alumnos su máxima de "Publish, and be damned!", o sea, "¡publica y que te maldigan!".

De la Serna afirmaba que "de una justificada sensibilidad se ha pasado a una obsesión censora de todo lo desagradable o catastrófico". Y comparaba que otras muchas fotos de enfermos de ébola y muertos  por el virus en África, no levantaron estas protestas.

El periodista recordaba lo que marca El Libro de Estilo, de El Mundo. "Los requisitos para publicar una fotografía son: 1. Que sea noticia en sí misma. 2. Que acompañe una información relevante. 3. Que añada información insustituible y enriquecedora. 4. Cuando excepcionalmente se quiera ejemplarizar sobre tragedias. Cuándo nos debemos plantear no publicar una fotografía: 1. Cuando su valor resida solo en un morboso impacto visual. 2. Cuando hiera la sensibilidad y no aporte apenas información. 3. Cuando aumente el dolor de los familiares".

De la Serna concluía que la imagen borrosa de la enfermera, que ilustraba la portada y confirmaba que seguía viva y luchando por su vida, no resultaba morbosa ni dolorosa; más bien esperanzadora. Y por eso se podía publicar, y se publicó.
Concluyamos elogiando el tesón y la paciencia del fotógrafo Javier Barbancho, que debió pasar largas horas con el ojo en el visor de su cámara, hasta que logró una exclusiva de gran valor informativo.


sábado, 9 de agosto de 2014

1, 2 y 3 Patrocinio, Publicidad y cuidado con las fotos.

Este es el punto de partida de un Blog para comentar temas relacionados con la Comunicación y la Publicidad, y de paso también, hablar de Publicity (las técnicas y estrategias para salir en los medios con noticias favorables), Prensa, Patrocinio, Relaciones Públicas (que es como llaman en USA a las relaciones con los medios), y también hablar de los periodistas y del periodismo en las empresas y para las empresas.
En Publicidad siempre se están buscando nuevas formas de llegar al público. Y el pasado jueves 7 de agosto, nos encontramos con una nueva y sutil manera de estar al lado o dentro de las noticias. En la páginas de Un Verano Extra (UVE) del diario El Mundo, nos encontramos en página 4, con la siempre atractiva crónica mundana de Carmen Rigalt que lleva por título "Sin factor de protección".
La del jueves estaba dedicada al regreso de SM Felipe VI, esta vez como Monarca, a la Copa de Vela. Y la sorpresa es que, debajo del pie de la gran fotografía, nos encontramos con el logotipo de la 33ª Copa del Rey, patrocinada por Mapfre. Un logotipo donde, obviamente, destaca el nombre de la aseguradora.
 


No sé cuánto habrán pagado por estar ahí, en el centro de la noticia, debajo del pié de la foto y al lado de la espléndida fotografía de Bernardo Paz, donde se ve al nuevo Rey en plena forma. Pero el espacio sutil de publicidad, lo vale. Según los especialistas, el público en general, lee las noticias por este orden: 1º) el titular, 2º) el pié de foto, 3º) los sumarios (breves frases que resumen el texto, que en este caso no los hay) y finalmente la entradilla. Si la entradilla o el comienzo es atractivo, el lector sigue. Si no, pasa a la página o a la noticia siguiente.
Y ya que hablamos de la Copa del Rey, conviene recordar que esta es una competencia que desde siempre, muchas empresas han querido patrocinar. La razón es sencilla: al acto de entrega de los premios asiste el Rey y por supuesto, el presidente y toda la plana mayor de la empresa patrocinadora. Y ya sabemos que muchos empresarios están dispuestos a pagar lo que sea, con tal de salir al lado del Rey.
He buscado en mis apuntes y en la presentación que utilizaba cuando daba mis clases de Comunicación Corporativa en el centro de estudios Tracor, de Madrid, y he encontrado la página de publicidad de Puig, con motivo de la Copa del Rey de Vela, del año 1996.
 

Y también en encontrado otro artículo de Carmen Rigalt sobre esta lucha de las empresas y las marcas por conseguir que el Rey lleve algunos de sus productos o se enfunde alguna camiseta con  la marca. “Todo en la vida tiene nombre: las personas, los barcos, las zapatillas deportivas, los cavas, las motos, los grandes almacenes, en fin, todo. Junto al espectáculo estrictamente deportivo coexiste un espectáculo comercial de grandes proporciones”, escribía el 1 de Agosto de 2003, en su contraportada "Testigo Impertinente". Y agregaba: las empresas tienen “toda una legión de sabuesos ávidos de colocarles a sus majestades un reloj Breitling, unas gafas Prada, un bañador Meyba. (…) Don Juan Carlos ya no sabe qué hacer para contentar a tanto sponsor vocacional”. (Carmen Rigalt. “La vida es una marca", El Mundo, 01-08-2003, contraportada).

Y hablando de camisetas y de marcas. Hace algunos años, el Rey Juan Carlos I participó en un acto deportivo promovido por Freixenet y fue fotografiado en un desafortunado momento en el que estaba rodeado de unas azafatas, que lucían estrechas camisetas con la marca del cava a la altura del pecho. La foto fue de lo más inoportuna y sirve para analizar el importante y delicado trabajo de los asesores de comunicación e imagen, que deben estar siempre atentos sobre cómo, dónde y especialmente, con quién, se fotografía su representado.


2. Periodistas con miedo.

El pasado jueves 7 de agosto Jordi Pujol se dejó ver y fotografiar en su retiro de Queralbs (Girona). Las cámaras lo mostraron acercándose a los periodistas para hacer declaraciones y me sorprendió la falta de garra de los periodistas. O eran becarios, o la fuerza del ex presidente les imponía o sencillamente no se atrevían a preguntar.

Dócilmente acercaron sus micrófonos y aceptaron las respuestas zigzagueantes y evasivas del político. Los asombroso es que ninguno se atrevió a soltar alguna pregunta fuerte, provocadora, agresiva, para sacarlo de su actitud autoritaria y caciquil. A nadie se le ocurrió preguntar si estaba arrepentido, si tenía miedo de ir a la cárcel, si pensaba irse al extranjero o si temía por la libertad de sus hijos. Más aún, ninguno tuvo la valentía o la imaginación de preguntarle si seguía pensando que "España nos roba".

3. Una foto para un premio.

Las guerras suelen ser los escenarios donde se producen grandes fotografías, algunas de las cuales terminan conquistando grandes premios. Los fotógrafos se juegan la vida en los frentes de batallas porque saben que allí siempre hay mil y una historias que harán vibrar las redacciones. La guerra es la mayor representación del drama humano frente al dolor y la muerte.

Hoy, 10 de agosto de 2014, el diario El Mundo nos ha sorprendido con una foto de Oliver Weiken, distribuida por Efe y llamada a ser un gran premio. Una foto que estremece por la tensión en los rostros de sus muchos protagonistas, todos ellos hombres, jóvenes y niños. La foto está tomada en Gaza y lleva un pié largo con un titular: "Con un ojo en la fila y otro en el cielo", porque se nota que los protagonistas están haciendo una cola para comprar algo, pero al mismo tiempo escudriñan el cielo por temor a un ataque.